La Convención sobre
la Protección de los Niños contra la Explotación Sexual y el Abuso Sexual de
2007 fue el primer documento internacional en señalar como delitos penales las
distintas formas de abuso sexual de menores, incluyendo el grooming y el
turismo sexual.
En algunas
legislaciones ya en marcha en algunos países se considera el grooming como un
delito preparatorio para otro de carácter sexual más grave. Por establecer una
analogía, sería como el delito de conspiración para cometer atentados
terroristas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario